domingo, 29 de abril de 2018

No estás sola

Querida víctima de La Manada:
No te conozco, pero seguramente me habrá pasado lo mismo que a millones de mujeres (y de hombres) tras escuchar la sentencia. Soy consciente de que es poco probable que algún día leas estas palabras pero, aunque así sea, quería dedicártelas.

Qué complicado es decirte algo...
Rabia, impotencia, tristeza, decepción, ira, desamparo, hastío, pesimismo, desconfianza, terror, soledad, desamparo, vergüenza...Estas son únicamente una ínfima muestra de las emociones que sentí entonces.

Decirte que, por supuesto, yo también te creo y NO estás sola, esa "condena" nos duele a todas/os.

Esta madrugada me han entrado ganas de escuchar a Manuel Carrasco, y me he acordado de ti. Si mal no recuerdo la canción se la dedicaba a las luchadoras contra el cáncer, pero en parte puede ser para ti. Sin duda alguna, todavía te quedan batallas por librar, pero bien acompañada, porque una multitud de personas te arropa, y ojalá así te sientas. Para ti, esta "Mujer de las mil batallas."


"Cariñoterapia"

He entrecomillado la palabra porque, por desgracia, la RAE (Real Academia Española de la Lengua) no la tiene registrada...tiempo al tiempo.

No tengo ni idea de cómo la definirán en internet, pero voy a hacer un "Juan Palomo" (Yo me lo guiso, yo me lo como). Para mí sería algo así como dar cariño a los demás cuando vemos que lo necesitan. Ojo, he puesto con toda la vista cuando lo necesitan, que no es sinónimo de que lo demanden. Intentad leed entre líneas.

Seguro que alguna vez os ha pasado que estáis deseando recibir un abrazo, y tarda más en llegar de lo que os gustaría. Quien dice un abrazo dice que te agarren la mano suavemente, pero con la fuerza suficiente para hacerte saber que están ahí, que están contigo. O una sonrisa franca, de esas que se acompaña con los ojos brillantes. Quizá un beso dado con dulzura. Tal vez una caricia en el pelo...No sé, cada uno sabrá cómo manifiesta el cariño y cómo prefiere que lo hagan con él /ella.

Eso sí, sed generosos, no seáis fríos ante las personas que veis que os necesitan. Personalmente me parece que la "cariñoterapia" no debe acompañarse obligatoriamente de palabras. U otras veces el cariño se demuestra con palabras más que con gestos. A mí me pasa una cosa curiosa, me cuesta más demostrar el cariño con las personas que sé que son muy cariñosas que con las que, podríamos tildarlas de ariscas incluso, y no lo sé explicar. No obstante esto no me parece justo y estoy "trabajando" en ello, lo prometo.

Así que os animo a demostrar vuestro cariño con los demás. Muchas veces  pongo en WhatsApp esta frase: "No dejes para mañana el cariño que puedas repartir hoy." Y así lo creo.



Reflexiones a mi manera

LA VIDA DA
La vida da que puedo expresar lo que siento a través de unas palabras como estas o como tantas otras.
La vida da que el respeto es un gran escudo.
La vida da que la educación es la mejor carta de presentación.
La vida da que hay silencios que son la mejor respuesta.
La vida da que los actos sitúan a cada cual en su sitio.
La vida da que la música me acompaña fielmente.
La vida da que tengo unos padres y un hermano fabulosos.
La vida da que cuento con amigos a los que considero mi familia.
La vida da que en mi familia me quieren tal cual, con mis más y mis menos.
La vida da que nunca me falta gente con la que poder contar...hasta el número que sea necesario.
La vida da que lo bueno siempre pesa más en la balanza, al menos en la mía.
La vida da que con el tiempo me estoy dando cuenta que en ocasiones (casi siempre) es preferible tener paz que la razón.
La vida da la persona capaz de arrancarme una sonrisa en cualquier momento.
La vida da que tengo un trabajo que adoro.
La vida que mis alumnos siempre son mi prioridad.
La vida da que mi gente me ayuda a relativizar.
La vida da que los que de verdad me importan me conocen con mayúsculas.
La vida da que hay compañeros aquí y allá con los que firmaría por coincidir eternamente.
La vida da que las palabras vomitadas se esfuman con la misma rapidez que se dijeron.
La vida da que podrán faltarme muchas cosas, pero nunca el apoyo y cariño de un nutrido grupo de gente.
La vida da que al final el esfuerzo suele verse recompensado.
La vida da que alguien puede iluminar tu día con un solo gesto.
La vida que el mundo también está habitado por gente buena.
La vida da que siempre hay una mano amiga cerca.
La vida da que en el vaso siempre hay agua suficiente.
La vida da que la tierra continúa girando, pase lo que pase.
La vida da y quita, que soy permeable a lo que sucede a mi alrededor.
La vida da que no soy de las que dejan de soñar.
La vida da que hay personas que todavía creen (creemos) en que un mundo mejor es posible.

Y como toda esta entrada va de eso, de vida, de pensamientos y sentimientos, la "ilustro" con unas imágenes de un manzano florido. Y ya puesta, como siempre...¡Gracias!



Fotografías propiedad de Raquel Plaza Juan


miércoles, 25 de abril de 2018

EMOCIÓNATE: día 23


Esta tarde no ha faltado nadie, y yo que me alegro.

En la fotografía superior tenéis un resumen visual de lo que iba a suceder en la sesión. Como viene siendo bastante habitual, muchas veces escribimos sobre renglones torcidos, y tuve que sustituir unas actividades por otras.

Teniendo tan cerca el Día del Libro, para mí era casi obligatorio empezar con un libro. Y además una de mis adquisiciones de ese día. Con Madrechillona de Jutta Bauer, quería aproximarme a todas las madres, con las que me siento muy identificada, que de vez en cuando gritan a su hijo y luego "cosen" las partes y se disculpan. Por lo que parece es normal que una mamá grite a veces. Frené al acercarme al final del cuento, para que trataran de adivinar cómo acababa. Ninguno acertó de lleno, pero un par de ellos predijeron cosas semejantes. Me llamó la atención la respuesta de uno de los niños, que la dijo en voz baja pero la escuché a la perfección: "La madre ya no grita nunca más. Ah no, que eso sería un final feliz." No me digáis que una respuesta así no da que pensar.

Luego recordamos en qué consistían las caricias emocionales y, gracias al recordatorio de una alumna, hablamos de si los cumplidos e insultos que reciben (o dan) se encuentran en equilibrio, o la balanza se desnivela hacia un lado u otro. Es preocupante que vean el insulto como algo "normal." Como no creo que sea así, sigo animándolos a gastar más saliva en cumplidos y ahorrárselas en improperios.

Luego vimos un fragmento de la peli "Tu vida en 65 minutos," que se titula "Por qué te quiero en 65 palabras." Aquí lo tenéis:

Sí, soy de las que piensan que a base de hacerles llegar el mismo mensaje de mil y una maneras, acabará calando en ellos. Solo pienso en su bien, y en la experiencia propia, soy más feliz intentando hacer a los demás felices, en la pequeñísima parte que su felicidad pueda depender de mí. Lo tengo muy claro, no vengo a amargarle la vida a nadie (ya, tampoco me gusta que intenten amargármela a mí), sino al contrario, lo único bueno de los obstáculos que "nos salen" es poder sortearlos acompañados. Aborrezco lo del "ojo por ojo y diente por diente." Creo más bien en actúa como creas que debas hacerlo sin importar cómo actuaron previamente contigo. Que alguien no me saluda, yo sí, e intento dedicarle mi mejor sonrisa, y sincera, porque estoy contenta, y punto. Y si ese día no me apetece sonreír, pues no lo hago, pero sigo saludando, con la mejor cara que pueda.

A continuación, teniendo en mente la importancia de las palabras, lo que cuesta hablar de las emociones; en particular lo que les cuesta a la mayoría de estos alumnos hablar de lo que sienten, les doy la "Tabla periódica de los emociones." Me gusta mucho, es de ArteVía y en este enlace podéis descargarla.

Hablamos de las emociones básicas, y les pedí a algunos que localizarán en la tabla emociones "negativas" y "positivas." En el caso de la soledad no hubo unanimidad. A mí me parece que puede ser ambas, depende de qué tipo de soledad.

En este punto, viendo que estaban muy inquietos, fuimos hasta el gimnasio. Esta tarde nada de círculos de masaje ni "Yo tengo un clic." Hicimos un par de rondas de abrazos encadenados. Estábamos todos en un círculo. Había dos normas: debían abrazar a alguien que no estuviera situado ni a su derecha ni a su izquierda; y la segunda, no podía quedar nadie sin abrazar. 

Salió regular, no voy a engañaros, tal vez no fue la mejor elección.

Entramos de nuevo en mi aula, comentamos la actividad de los abrazos y cómo se habían sentido. Una niña dijo que ella mal, porque le parecía que la gente se lo tomaba (todo lo que hacemos) en plan broma, y no tenía que ser así. Y no puedo estar más de acuerdo, aunque sin generalizar. Tomo nota para la semana que viene y me aventuro a plantearles algo que tenía reservado para el último día del taller.

Es un riesgo, ya sabréis por qué el próximo miércoles, pero ha llegado el momento de arriesgarse e intentar dar un vuelco a detalles que están complicando, mucho más de lo esperado, el adecuado desarrollo del taller.

Y en el camino, por el vídeo de "Por qué te quiero en 65 palabras," me topé con una canción que hacía un par de años que no escuchaba. Es By your Side, de Luthea Salom. Y así, a vuestro lado, me despido por hoy.


lunes, 23 de abril de 2018

3,2,1...¡A leer!

Escribo al filo de la medianoche, a punto de terminar, entre otras celebraciones, la del "Día del Libro."

Este año he estado menos tiempo en la Plaza que otras veces, creo que he agobiado al ver que la cantidad de gente aumentaba y era complicado moverse con soltura. A eso hay que sumarle que muchos puestos tenían los mismos libros "destacados" y eso me resulta muy monótono. Me gustaría que arriesgasen un poquito más. Entiendo que los que previsiblemente van a vender más sean parte de sus puestos, pero con esos ya contamos, no sé si me explico.

He visto el inicio del concierto de música que, si la vista no me traiciona, no ha sido de la Banda Municipal (como es tradición), sino de la Banda de Alba de Tormes. Me he quedado de piedra al reconocer que tocaban "Amor de hombre", de Mocedades, me encanta. Y ya he seguido escuchándolos desde los soportales, mientras paseaba entre librería y librería. Qué ilusión escuchar también varias canciones de Nino Bravo, era como si me hubieran dejado elegir el repertorio, una delicia.



Imagen propiedad de Raquel Plaza

Ha sido también un ratito de encuentros "docentes," compañeros de unos destinos u otros, y parece que esta mañana ninguno se quedó en casa.

Y justo al final, descubro entre las personas de la librería Beatriz Galindo, La Latina, a Suso, el alma de la ya extinta Hydria. Desconozco si trabaja con ellos o simplemente los conoce y, de alguna manera, quería estar presente del lado de los libreros. Es una sensación extraña, me he alegrado de poder saludarlo, pero a la vez me ha dado mucha pena. Es complicado de entender, Hydria (y Carletes, la sección infantil de Hydria) era hoy la gran ausente...Qué lástima, supongo que era algo que debía pasar, pero duele igualmente.

Entre saludos, besos y conversaciones breves, fui parándome en algunas librerías (bastantes) y curioseando un poquito. Compré un regalo y los que me regalo a mí misma (siempre acierto oye), todos debidamente sellados y con su marcapáginas. Por cierto, menos mal que al sello conmemorativo del día de hoy, el Ayuntamiento añadió otro, celebrando los 800 añazos de nuestra Universidad.

Os dejo una imagen de mis adquisiciones...Lo del regalo no aparece, porque quiero que sea una sorpresa:



En realidad, además de los anteriores y lo del regalo, he cogido dos más on-line en La Casa del Libro...

Esta noche, antes de apagar la luz...¡A leer! Esa sensación de tener un libro nuevo entre las manos, el olor del papel, el tacto...Todo.

El día del libro...¡Yo LIBRO!

Una vez leí la frase con la que he titulado esta entrada, y me hizo gracia. Para mí tiene doble significado. Por una parte, que el 23 de abril es la fiesta de mi comunidad autónoma (Castilla y León), y soy de las afortunadas que no trabaja este día. La segunda, del libro como tal, aunque dicho en plan indio. No recuerdo un 23 de abril sin comprar algún libro. Más que nada porque pienso que si a lo largo del resto del año los compro, sería un sinsentido no hacerlo también durante la jornada que los rebajan un 10%. ¿Verdad?

Así que si entra dentro de vuestras posibilidades, os animo a daros una vuelta por la Plaza Mayor, echar un vistazo y adquirir algún libro (para vosotros mismos o para regalar). Recordad que podéis pedir uno de los marcapáginas numerados que edita el Ayuntamiento para este día, y debajo del reloj, en la planta baja del Ayuntamiento, os sellan los libros que hayáis comprado, por si os apetece.

Por raro que parezca, ahora mismo no tengo muy claro qué libro/s voy a comprar. Eso tiene mucho peligro, porque es fácil que encuentre un número importante de libros que me gusten y que, obviamente, mi sentido común me impedirá comprar. Además, en mayo está la Feria del Libro de Madrid y pienso "dejarme caer" por allí, pero sin las prisas del año pasado.

No voy a recomendaros absolutamente ninguno: pasead, mirad, hojear y ojear y, según en qué momento de vuestra vida estáis, dejad que sea vuestra intuición la que os aconseje.

Como este año nos falta Forges en un día tan importante, he querido acordarme de él aquí.



La segunda ilustración es de Agustina Guerrero y su personaje La Volátil. Y es que me identifico con ella, también yo amo los libros.


Me resulta difícil resumir en pocas palabras la importancia de los libros. Por eso me he decantado por hacerlo primero, con una imagen; justo debajo, con palabras, tal cual se me iban ocurriendo.

Ilustración propiedad de Raquel Plaza Juan

Si ríes, LEE.
Si lloras, LEE.
Si pierdes, LEE.
Si buscas, LEE.
Si encuentras, LEE.
Si dudas, LEE.
Si sabes, LEE.
Si escuchas, LEE.
Si ignoras, LEE.
Si juzgas, LEE.
Si perdonas, LEE.
Si comprendes, LEE.
Si olvidas, LEE.
Si recuerdas, LEE.
Si educas, LEE.
Si aprendes, LEE.
Si enseñas, LEE.
Si estudias, LEE.
Si ves, LEE.
Si observas, LEE.
Si compartes, LEE.
Si juegas, LEE.
Si disfrutas, LEE.
Si te aburres, LEE.
Si ayudas, LEE.
Si sientes, LEE.
...
Si vives...¡LEE!

¡FELIZ DÍA DEL LIBRO!

domingo, 22 de abril de 2018

EMOCIÓNATE: los dos patitos

Crónica de la sesión número 22 de Emociónate. 


https://cuadernodetrabajo.wordpress.com/2015/05/30/los-dos-patitos/
Estoy muy contenta, porque veo que vamos volviendo a los orígenes, a los motivos por lo que decidí plantear este taller. Nadie dijo que fuera fácil, soy consciente de lo arriesgado que resultaba optar por un taller en el que los protagonistas fueran los sentimientos, las emociones.

El pasado miércoles 18 de abril, asistieron dos niños y cuatro niñas al taller.

Hace no mucho había visto un vídeo que me había encantado, y me parecía idóneo para verlo con los niños. Gracias a Lucy Vega por haberlo puesto en Facebook. Se trata de un "experimento social"  para promocionar la segunda temporada de la serie "Por 13 razones." Hago un pequeño inciso, la serie no la he visto, pero sí he leído el libro en el que se basa. Y si alguien quiere material que hable del bullying, que lo lea, no le llevará mucho tiempo.

Ver vídeo EXPERIMENTO SOCIAL promo 2ª temporada "Por trece razones."

Como habéis podido comprobar, el vídeo dura poco, aproximadamente tres minutos y medio, pero tiene mucha "chicha." Dio para mucho, para reflexionar, una vez más, sobre cómo las palabras que les decimos a los demás pueden repercutir de manera muy negativa en ellos (cuando son dañinas) o hacerles mucho bien (cuando son agradables). Les pregunté, pidiéndoles que no me dijeran ningún nombre, si los insultaban (en su día a día) y si ellos a lo largo de la semana solían insultar. Aunque suene paradójico, ellos eran insultados, pero también insultan. En este punto ya me puse más seria, y les dije que qué curioso que a ellos les molestara que los insultaran pero luego sí insultaban. Otra vez lo de "trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti," parece sencillo, está claro que más sencillo de decir que de hacer, una lástima.

Qué importantes son las palabras, y hay que ver qué poco las cuida la gente (y del tono mejor ni hablamos). Cada día contemplo menos humanidad y más gente falsa, y me da pena, mucha pena.

También analizamos la segunda parte del vídeo, con las "cosas bonitas" que unos les dedican a los otros, y el cómo podrían estar sintiéndose todos según lo que recibían o daban.

Les sugerí que hagan a los demás "caricias emocionales". Que nadie se asuste, que en este caso no son otra cosa que palabras bonitas, cumplidos, piropos...Sería muy bonito que arrancáramos a los demás una sonrisa en vez de provocar sus lágrimas, ¿no os parece?

Y tristemente me he dado cuenta que algunos no pueden hacer lo que no saben, lo que no han vivido. Me explico, por ejemplo, no le podemos pedir a un niño/a que no recibe cariño de quien debería tenerlo y en cantidades ingentes, que demuestre su cariño hacia otros, porque no sabrá hacerlo, así de simple, así de triste.

Os remito a la "silla de los cumplidos", que ya empleamos en otra sesión.

Después los invité a salir de aula y acercarnos al gimnasio. Allí hicimos un círculo. Sin explicación alguna, le pedí a una niña que dijera "izquierda o derecha", y hacia ese lado nos giramos todos. Estando en esa posición, el círculo era un círculo de masaje. Con un par de normas, solo se podía masajear la espalda, y nada de dar golpes. Había que intentar que fuera algo agradable y no incómodo para la otra persona. En un segundo momento cambiamos la espalda por la cabeza. Salió regular, en algunos casos la gran diferencia de estaturas dificultó bastante la dinámica.

Después les expliqué la actividad "Yo tengo un tic", creo que como mejor se entiende es con este vídeo:



Perdonad las faltas ortográficas del vídeo anterior. De los vídeos disponibles en internet sobre "Yo tengo un tic", es el que más me gusta, por eso lo he incluido, pese a las faltas.

Tengo que confesaros que nos reímos mucho, pero no logramos llegar tan lejos como en el vídeo. Me parece que habrá que repetirlo en otra ocasión.

Y con la energía que teníamos, acabamos haciendo un instrumento casero bien sencillito. Solo necesitáis para cada niño dos vasos de plástico (los cogí de colores, pero transparentes también pueden quedar muy bien), un puñadito de arroz (de lentejas, pipas... también vale), gomets de colores y celo de algún color que os guste.

Os dejo dos fotos de los niños con sus instrumentos recién hechos:


Hacer click en la imagen para ampliar

Fotografías propiedad de La emoción de aprender

Como habéis visto, es muy fácil, se tarda muy poco en hacer y lo probamos con la canción Vivo cantando de Salomé. ¡Calentando motores para Eurovisión!



lunes, 16 de abril de 2018

Un día de 10

Sí, estoy convencida que será así, a pesar de ser lunes. Porque 10 años son los que "cumplo" hoy, 16 de abril de 2018, trabajando oficialmente como maestra. 

En todo este tiempo, el destino, que sí es bastante caprichoso, me ha llevado a lugares que no me esperaba ni por asomo y a otros a los que voluntariamente pedí ir, e incluso repetir. 

No voy a mencionar cole a cole (e instituto entre medias), porque ya hice lo propio hace un año y en el dibujo que incluyo debajo no falta ninguno.

Imagen propiedad de Raquel Plaza Juan
Creo que en cada sitio he aprendido y continúo aprendiendo una barbaridad. Y echando la vista atrás lo mejor es que me quedo con lo positivo, y lo negativo es como si se hubiera desvanecido, casi como si nunca hubiera pasado. Y he de reconocer que a lo largo de estos años he vivido momentos excelentes, pero también algunos bastante duros.

Tengo la suerte de dedicarme a algo que me apasiona, la docencia. Y, debido a las circunstancias, voy un pasito más allá, a la educación. No mucha gente puede decir eso, que su profesión le encanta. Sí, una vez más me doy cuenta de lo afortunada que soy.  

En esta década, que para mí ha sido prodigiosa, por la de innumerables instantes únicos que he vivido, me he encontrado con gente muy distinta. Lo bueno es que en la variedad está el gusto, que el tiempo pone a cada uno en su lugar y mantiene "cerca", de una manera u otra, a los que de verdad valen la pena. Y de cuando en cuando me sorprende con personas que daba por perdidas o que me habían olvidado. No soy de cortar lazos salvo que exista una buena razón para hacerlo.

Hoy, más que nunca, me gustaría mantener ese hilo rojo que dice una leyenda japonesa, que une a las personas que están predestinadas a encontrarse. Sé que en algunos casos se ha estirado, se ha liado un poco, pero cuando hay cariño del bueno, del de verdad, no se ha roto. El hilo sabe cuándo debe mantenerse en su sitio.

Con motivo de esta fecha, tan bonita para mí (me importa un bledo si suena cursi), he pensado que debía hacerla más inolvidable si cabe. En noviembre pasado, por el primer aniversario de este blog, envié un marcapáginas (o entregué en mano, según la distancia) a las doce primeras personas que comentaron aquella entrada. En esta ocasión quiero ir más allá. 

Las diez primeras personas que se animen a comentar lo que les apetezca en esta entrada, recibirán un detallito, vía Correos (sí, sigue existiendo y me encanta darles trabajo), hecho por mí y que prefiero no desvelar para mantener el misterio. Una pequeña advertencia, os lo enviaré en el plazo de un mes, el cariño no entiende de prisas y quiero que sea "algo" que os guste de verdad.

Por favor, recordad que no valdrían entonces comentarios anónimos, necesito que os identifiquéis. Por ejemplo si ponéis "María" o "Pepe", sin más, me dejáis a cuadros.

Así que esta entrada es para vosotros, con los que he tenido la suerte de coincidir de una manera u otra en mi entorno educativo.

Lo mejor de todo es que al escribir esta entrada, mi cabeza está haciendo, a velocidad de vértigo, su propio resumen en imágenes, cómo no, y se me saltan las lágrimas. Pero no son lágrimas de tristeza, sino de alegría. Y me acuerdo de compañeros, de amigos, de madres de alumnos, de algunos padres (las madres ganan por goleada en esto de asistir a tutorías...aunque hubiera padres sin trabajar), personas unidas fuera de los centros educativos a mis alumnos y, por supuesto, de ellos. Sí, ellos, mis alumnos, o "mis niños", como cariñosamente los llamé, llamo y seguiré llamándolos.

Muchos ya son mayores de edad (o más). Los actuales no, claro está. Y bien orgullosa que me siento de todos. Sí, sin excepción. 

De los que me dieron guerra, de los que me ayudaron; de los que me ignoraban; de los que me hacían caso; de los que me sonreían; de los que estaban deseando perderme de vista; de los que querían que me quedara con ellos; de los que confiaron en mí como si abrieran su corazón de par en par; de los que no se fiaban un pelo de mí; de los que sacaban dieces, de los que suspendían, de los que me mintieron; de los que fueron sinceros; de los que me miraban con ojos de rabia; de los que pedían ayuda sin abrir la boca; de los que me demostraban su cariño; de los que nunca recibí una palabra de aliento, disculpa o gratitud; de los que reconocían cuándo habían metido la pata hasta el fondo; de los que sabían si me pasaba algo con solo una verme la cara...De TODOS. GRACIAS por tantas cosas que se pueden enumerar y otras que prefiero no poner para no traicionar la confianza de ninguno. Y como siempre, al gracias lo acompaña un LO SIENTO, por si en alguna ocasión mis palabras o mi comportamiento pudieron haceros daño.

Y cierro esta entrada con una foto de una juguetería de Medina del Campo, del sábado pasado.  En cuanto vi lo que ponía pulsé el obturador de la cámara. Resume muy bien quiénes son los más relevantes para mí.


Imagen propiedad de Raquel Plaza Juan
Y, puestos a pedir, que los diez próximos años, sean, como mínimo, igual de buenos que estos.

La nota musical la pone El Kanka, con un canto a la vida, a los detalles.


jueves, 12 de abril de 2018

Amor de hijo...por César Brandon

Es una noticia, y a mí me parece una muy buena. César Brandon se alzó con la victoria en el programa Got Talent de Telecinco. Qué alegría. No sigo el programa habitualmente y la final no fue una excepción, pero gracias a vídeos en Facebook me picó la curiosidad y descubrí a este joven, de Guinea Ecuatorial, que es una auténtica joya, un verdadero mago de las palabras. Os dejo un enlace al vídeo con el poema del programa final. Este chico no da puntadas sin hilo:

Poema César Brandon FINAL Got Talent


No robo las palabras de nadie, en cualquier caso las tomo prestadas. Podría escribir mil y una entradas del blog solamente basándome en los poemas de Brandon, pero tranquilos, no lo haré. Me ha llegado al alma lo de resumir la vida en "pedir disculpas, dar las gracias y decir por favor."

Perdón, gracias y por favor...¿No os parecen unas palabras bellísimas? Quizá mis alumnos no alcancen los objetivos que las leyes marcan a nivel académico, puede ser. Pero puede ser también que logren otros mucho más relevantes. Y si consigo que algunos aprendan a disculparse, dar las gracias y decir por favor (o la importancia de estas palabras), seré mucho más feliz que si tienen un 10 en los contenidos, porque habrán conseguido un sobresaliente en humanidad.

Qué incoherentes son los adultos que demandan a los niños lo que ellos no son capaces de hacer. Nunca les pediré a los míos que hagan el pino-puente o escalen una montaña, porque yo no lo hago. Sí, pueden hacer mucho e incluso superarnos (qué alegría que un alumno te "supere" en algo), pero a ver cuándo nos metemos en la cabeza que hay que predicar con el ejemplo.

Mi más humilde enhorabuena, porque no creo que jamás llegue a leer este blog, a César Brandon, de corazón. Hay veces que llueve,  y otras, como con él, sale el sol y, cuando se hace de noche, miramos al cielo y está plagado de estrellas, esta noche brillan un poquito más por cierto.



miércoles, 11 de abril de 2018

EMOCIÓNATE: día 21

Estoy segura que alguna vez os ha pasado, que os esforzáis para que algo salga bien y alguien se empeña en todo lo contrario, en lograr que todo salte por los aires. Pues bien, algo así me ha pasado a mí esta tarde.

Que sí, que la vuelta a la rutina después de once fabulosos días de asueto es difícil para todos. A mí lo que más me cuesta es reencontrarme con el despertador, porque aunque me levanto a la primera (rara vez eso de "cinco minutitos más"), que suene a las 7 de la mañana ni me agrada ni me agradará nunca.

En esas estamos, intentando retomar el ritmo de todo, cuando a mitad de semana toca el turno del taller Emociónate. Hoy vinieron siete alumnos, que creo que son los que ya van a estar de manera fija. Planteo recuperar las manos que estampamos de manera individual sobre cartulinas,  van pasando por las manos de todos y todos nosotros tenemos el "encargo" de poner en la cartulina de cada cual un adjetivo o algo agradable de esa persona. Sin anonimatos (tengo mis motivos), poniendo quién ha escrito qué. Matizo que si alguien no va a escribir algo que sea bueno de alguno, con sinceridad, que se ahorre la tinta. Un alumno protesta, cuando tiene mal día parece que todos los demás lo tenemos que tener, y lo peor es que hay momentos en los que se sale con la suya (hoy fue uno de esos). Escucho comentarios que no me gustan un pelo y cosas que no entiendo, no entiendo que dos alumnos prefieran dejar en clase y no llevarse a casa la hoja con lo que sus compañeros y yo les hemos escrito. No me entra en la cabeza, o mi cabeza elige que no le entre porque el corazón no lo comprende...¿Alguien me lo explica? 

Habría preferido poner una foto de las manos en general, como conjunto, pero algunos niños no querían. Como no tengo ningún problema en compartir la mía, justo debajo la tenéis, y no me habría importado publicar lo que le puse a cada uno.

Podéis ampliar esta imagen o cualquier otra, pinchando sobre ella

Doy paso a la segunda actividad, que se imaginen que son un árbol. Solo tienen una cartulina blanca y pintura de dedo de los tres colores primarios. Advierto que no pueden usar los pinceles, únicamente los dedos. Deben imaginarse cómo es el árbol que son y pintarlo, así de simple (o de complicado).

Cuando la actividad está ya muy avanzada, el mismo niño que fue el que más dio la nota en la primera parte, veo que está pintando con un pincel. Me avisan los demás. No monto el pollo porque a estas alturas de la película creo que es mejor no discutir con él. Pero no, no basta, sigue en su línea, provocando a compañeros, picando a un "amigo" que, para mi desgracia, se deja llevar por él. Hasta que llega el "hasta aquí hemos llegado" y les digo a ambos cuatro cosas. Su actitud, cuchicheos, desprecios hacia los demás...Lamentable. No volverá  a repetirse semejante escena, he puesto demasiado tiempo, cabeza, pero especialmente ilusión y corazón en este taller, como para que venga un alumno rebotado de casi todo y enfadado con el mundo, que quiera derribar todo cual castillo de naipes. Y confío en que varíen, él y el que tristemente pega un cambio (para mal) de 360 grados cuando está junto a él. No pienso rendirme y toca darle la vuelta a la tortilla.

Aunque os sorprendan las fotos que, afortunadamente no reflejan el mal sabor de boca que me quedó al acabar o el mal rollo que padecimos todos en algunos momentos de la sesión, doy fe que son de esta tarde.





Todas las imágenes son propiedad de La emoción de aprender
Y enseguida me he acordado de un vídeo que salió en TV en el programa El Hormiguero hace unos tres años y medio, precisamente sobre algo que comentaba anteriormente, "darle la vuelta a la tortilla." La semana que viene, como dicen Mónica Naranjo, Imanol Arias y El Cigala, nos tomaremos un "pincho de felicidad."



lunes, 9 de abril de 2018

Profesores que inspiran: Pedro Peinado

Pedro Peinado es profesor del Instituto Salvador Sandoval, en Las Torres de Cotillas, en la región de Murcia.

Hace dos días, al leer El Mundo, vi un artículo sobre él y su labor docente con alumnos complicados.  A través de un proyecto denominado "Plantando números", el profesor Peinado ha enseñado Matemáticas gracias a un huerto durante tres cursos.

Por cierto, que lo de alumnos "complicados" me hace incluso gracia, me parece que no hay alumno sencillo, porque los seres humanos somos así, complicados, difíciles o como queráis llamarlos. Siempre me acuerdo de un profesor mío de Lengua, Literatura y Latín, ya fallecido, cuando nos decía: "Ca' uno es ca' uno y tiene sus caunadas." Y don José Antonio, razón no le faltaba. Aunque entiendo que dentro de complicados hay diferentes grados (afortunadamente).

Ver ARTÍCULO El profesor que plantaba números y enseñaba Matemáticas con pimientos

Me parece que el contenido del artículo es interesantísimo, no solo porque explica el proyecto, sino también porque en él se ve la pasión de un profesor y podemos leer varios testimonios de alumnos que han pasado por ese huerto.

Es de esas historias que debería salir en los titulares, de esas historias que merecen ser contadas y compartidas con el resto del mundo, no solo del ámbito educativo.

Y quizá a vosotros no os llame tanto la atención, pero a mí me encanta toparme con historias tan cercanas que nos sirven de ejemplo y pueden servir de inspiración. Y más todavía ver que es de los que ha luchado por los alumnos de los que muchos otros pasan, se olvidan o no quieren saber nada de ellos. A mí me va esa marcha, esa lucha de remar contracorriente. Sí, aunque a veces las fuerzas flaqueen y den ganas de no intentarlo nuevamente. Qué rabia me da lo solos que se sienten muchos alumnos. 

Y aquí la lanza va a la ESO, porque en los colegios me he encontrado algunos, pero en el instituto era llamativa (y triste) la cantidad de ellos que hay, deseando que alguien, de una manera u otra, les tienda la mano o simplemente les preste un poquito de la atención que la mayoría le ha negado.

Qué mejor broche que unas palabras del profesor Peinado: "Innovar no solo es integrar metodología, también es integrar personas." Más de acuerdo, imposible. 

Fuente: http://glionequipo.blogspot.com.es/2011/05/funciones-del-lider-para-integrar.html

sábado, 7 de abril de 2018

CAMPEONES: una lección de vida

Ayer se estrenó la película Campeones, del director Javier Fesser. Si no os suena, os diré que es una historia de superación, sinceridad, empatía, compañerismo, colaboración, ternura, inocencia...Son solo algunos de los sustantivos que se me ocurren a bote pronto. ¡Ah sí! Todo esto contado a través de  los ojos de un grupo de jóvenes con discapacidad intelectual y un entrenador muy particular.

Para los curiosillos, pongo aquí el tráiler. Aunque os diría que fuerais a verla al cine, sin saber mucho más. 

La sensibilidad del director traspasa la pantalla. Y a mí me ha pellizcado el corazón. Mencionar también a los actores, con Javier Gutiérrez a la cabeza y ese grupo de chicos tan único, que a veces no sabes si están actuando o siendo ellos mismos, pero el resultado sigue pareciéndome mágico.

Es increíble como una película puede hacerte llorar y sonreír casi a partes iguales (y en muchos momentos las dos cosas a la vez). Salí encantada del cine y muy emocionada.

Campeones es de esas historias que te hace reflexionar sobre tu comportamiento y el ajeno, también sobre la crueldad y la importancia de aceptarnos y querernos tal como somos, con las circunstancias de la vida de cada cual. 

Me encantaría que todos mis alumnos pudieran ir a verla. Por eso, los que tengáis la posibilidad, no lo dudéis. También me parece muy apropiada para alumnado de Secundaria. De hecho, para mí sería de visionado obligatorio para los futuros maestros y todos los docentes. 

Da igual cuántos años tengáis, vais a disfrutarla.

viernes, 6 de abril de 2018

Reinventemos juntos una escuela para todos

El título de esta entrada es el lema de la 34ª edición del concurso escolar de la ONCE. Como muchos sabéis, el curso pasado los por entonces alumnos de 4º de Primaria y yo participamos, quedando ganadores de las fases provincial y autonómica. Este año, participando con el mismo grupo, ya en 5º, no hemos pasado la primera fase. Igual que se celebran las victorias, hay que saber "perder." Lo de perder lo dejo entrecomillado porque es relativo. espero que aunque sea un poquito, algo les haya quedado de la escuela inclusiva. Y eso ya es un premio. Sé este resultado desde el 28 de marzo, último día antes de las vacaciones de Semana Santa. No quise esperar y se lo comuniqué a los alumnos y a su tutora al momento. Si he tardado en escribir esta entrada, es porque quería incluir en ella un enlace para que todos podáis ver los ganadores provinciales de las distintas comunidades autónomas. Merece la pena echarle un vistazo.

Ver GANADORES PROVINCIALES 34º Concurso ESCOLAR ONCE

No es momento para analizar motivos de por qué no hemos llegado más adelante, para mí lo que toca, sinceramente, es dar la ENHORABUENA a los ganadores provinciales de las tres categorías. Y ojalá alguno de los ganadores salmantinos, corra la misma suerte que nosotros en la fase autonómica. Por eso, FELICIDADES al Colegio María Auxiliadora de Béjar, ganador provincial en las tres categorías. ¡SUERTE en la fase autonómica!

Comparto con vosotros dos imágenes. La primera no es la que mandamos al concurso. Fue una de las pruebas que hicimos antes, me encanta porque aparecen todos los alumnos de 5º del CEIP Beatriz Galindo. La segunda sí es la que presentamos. Fue una pena que faltaran personas ese día, pero no podíamos retrasar más la entrega del trabajo. 


Fotografías propiedad de La emoción de aprender.


En cualquier caso, una alegría haber podido participar dos veces con vosotros.

Aunque no hayamos ganado la fase provincial, considero que es muy importante seguir trabajando (todos) para hacer posible una escuela inclusiva. Una escuela inclusiva en la que no se escatimen recursos personales, económicos y de otros tipos. La escuela inclusiva es posible si todos nos damos cuenta de lo que conlleva, si remamos juntos en la misma dirección, si nos tratamos como compañeros dejando a un lado todo lo demás, si nos respetamos y, por encima de todo, si actuamos de una manera coherente en la que lo más importante sean los alumnos y, de verdad, pensamos en su bien.

Y tú...¿qué sueñas?

Es curioso como una canción me ha inspirado a escribir esta entrada del blog. La canción "Sueño" de Las Magdalenas. Esas dos voces angelicales, que canten lo que canten a mí me suenan a canción de cuna. Y no me parece algo despectivo, lo digo como un cumplido. Me transmiten calma, y paz, mucha paz.

Comprobadlo vosotros mismos:


Y con Sueño de pretexto, aprovecho para hacer este breve recordatorio sobre la importancia de la ilusión, de soñar (dormidos o despiertos), de la esperanza...Qué bonito es soñar, y mucho más bonito incluso cuando ves que, aunque sea a paso de tortuga, los sueños se transforman en realidad.

Da igual la edad, soy una persona adulta y reconozco que todavía tengo sueños por cumplir. Y, afortunada que soy, otros tantos que ya se hicieron realidad. De los sueños pendientes, estoy convencida que muchos de ellos no van a ser siempre sueños, no se quedarán en eso.

No sé si vosotros soñáis o no, si ya perdisteis la ilusión o la conserváis, pero prefiero pensar que sí. No hace falta ser un niño para soñar. Intentadlo, no dejéis de hacerlo. Da lo mismo lo que otros piensen, los sueños de cada cual merecen ser respetados.

No dejéis de soñar...Buenas noches.

miércoles, 4 de abril de 2018

EMOCIÓNATE: días 19 y 20

Aunque pueda resultar extraño, inauguro las entradas de abril con contenido de marzo que, como siempre debido a que el día no me da más de sí, no he tenido la oportunidad de incluir antes en el blog.

Como habéis podido comprobar los que hasta ahora habéis seguido los resúmenes de las sesiones de Emociónate, casi siempre me he centrado en un sentimiento/emoción. Me parecía bastante más sencillo para que los niños pudieran identificarlas, reconocerlas (en ellos mismo o en otras personas) y, como soñar es gratis, aventurarse incluso a gestionarlas (un poquito). Pero no hay mayor prueba de si algo funciona o no que ponerlo en práctica. Y a mí la práctica me dice que quizá no estuviera siguiendo el camino adecuado.

Pensad algo, nosotros, en nuestro día a día no sentimos una sola emoción, sino que experimentamos varias y generalmente hacen acto de presencia de una manera combinada.

Siendo consciente de todo lo anterior, para la sesión del pasado 21 de marzo, les dije que era mejor que llevaran una camiseta o algo parecido que se pudiera ensuciar sin problemas. Forré las mesas con bolsas de basura, para no trabajar sobre los pupitres directamente. Primero eligieron una cartulina tamaño din A-4 y una pintura de dedos. Les pedí que "estamparan" la palma de su mano en la cartulina (la usaremos dentro de algunas sesiones). A continuación les di a cada uno arcilla blanca, aproximadamente (a ojo) la misma cantidad para cada niño/a. Tuvieron total libertad para trabajar con ella. No tenían ninguna consigna, cada cual era libre de hacer lo que le apeteciera.


Pinchando en la imagen que queráis, se amplía.
 





Imágenes propiedad de La emoción de aprender
Para mi disgusto, dos de ellos fabricaron con la arcilla una pistola. Mejor dicho, uno la hizo y el segundo lo imitó. Lo mejor fue el principio, ver como la mayoría se desahogaban con la arcilla, dándole unos golpes considerables, ruido que en parte se vio amortiguado por la música de fondo. Creo que siempre que en alguna actividad, como alumna, me ha tocado trabajar con algo parecido, barro, nunca me han dado libertad para hacer lo que me apeteciera. 

Después de los golpes a la arcilla, tocaba darle forma, eso fue ya más difícil. Sigo pensando que el bombardeo de nuevas tecnologías a las que están expuestos los niños fuera del cole, hace que su imaginación mengüe a velocidad de vértigo. Sentí cierta rabia cuando algunos me pedían ideas o incluso pretendían que fuera yo la que les hiciera algo con la arcilla (lo siento mucho, pero me negué).

Entre medias dos de ellos se obsesionaron con hacer unos genitales masculinos, creo que era un intento de llamar la atención más que de interés real.

Y, con la mayoría habiendo hecho "algo", terminamos la sesión dejando secar nuestras creaciones. Me parece que en general se divirtieron mucho.

El miércoles 28, con la mente de absolutamente todos puesta en las vacaciones de Semana Santa, proseguimos con la actividad anterior.

Los que no hicieron nada en la primera sesión, lo intentaron en esta segunda. Los que ya tenían algo hecho, pasaron a la siguiente fase, a pintar. Como les sobraba tiempo, les dejé ayudar a otros compañeros o les di la opción de hacer algo más con la arcilla.







Es verdad que para una hora se prepara una considerable, porque hay que tener la clase acondicionada y todo listo para manchar lo mínimo y que todo esté a su alcance. A pesar de todo, es bonito ver cómo cada uno refleja algo de él mismo (gustos, personalidad...) en lo que hace con la arcilla. Me preocupa la escasa imaginación que vi. Lo que les queda (pintar y/o dar brillo) lo reservo para un recreo.

No creáis ni por un instante que no trabajamos las emociones, al contrario. En estas dos sesiones pude ver y percibir su alegría, rabia, dolor, inseguridad, independencia (o dependencia), tristeza, nerviosismo, ternura...Fue una lluvia emocional sin haber hablado de ninguna en concreto.

Y el miércoles 11 de abril volveremos a Emociónate, pero con aires renovados y dinámicas distintas. Y seguiré haciéndolo así hasta que dé con la mejor fórmula para el Taller. A los que como yo seguís inmersos en las vacaciones de Semana Santa, no desperdiciéis ni un segundo, estos días pasan volando...Como creo en lo de renovarse o morir, en cuanto vuelva al aula de Compensatoria voy a desmontar el dibujo que hice al poco de llegar al Beatriz Galindo (septiembre de 2016). Es el que cierra esta entrada. Me gusta mucho el dibujo y lo que representa, pero hay alumnos nuevos, bastantes se mantienen, otros que se han marchado y un cuarto grupo que nunca llegó a estar. Me parece que ha llegado el momento de actualizarlo. ¿Qué voy a poner? Eso es una sorpresa hasta que no esté hecho y puesto en su sitio.


Todas las fotografías de esta entrada son propiedad de La emoción de aprender.