domingo, 22 de octubre de 2017

Del blog de Manu Velasco. Gran reflexión

Como bien sabéis, es frecuente que haga referencia a recursos que encuentro que me parecen interesantes. A veces esas reflexiones parten directamente de mí, son personales al 100 por 100. Y otras, como ahora, escribo inspirándome en las palabras de otros docentes, escritores...

Me parece obligatorio citar en este momento El blog de Manu Velasco (incluído en la columna de la izquierda en webs que recomiendo). En concreto, una entrada que no fue escrita por él, sino por su mujer, Gaëlle Vargas Le Men. En Las otras TIC: Ternura, Interés y Cariño, Gaëlle desgrana tres ingredientes muy relevantes a la hora educar.

La verdad yo no concibo la educación sin ellos. Y algo muy importante en cuanto al interés, ya de mi cosecha. El interés ha de existir en todos los agentes educativos: en la familia, en el alumnado y en los docentes. Cuando la familia no se interesa por sus hijos en general, y ya por sus estudios en particular, nos encontramos atados, no totalmente pero sí en parte. 

https://sites.google.com/site/escolarizadocetis166/padres-de-familia/compromiso-del-triangulo-escuela-alumnos-padres

FAMILIAS, os necesitamos, contad con nosotros como nosotros contamos con vosotros. Creed en vuestros hijos, con sus características (sean las que sean), en su margen de mejora, en sus opciones de un futuro mejor. Valorad sus logros, sus pasitos, aunque no sean muy grandes, o no vayan muy rápido. Estamos para ayudaros, no para poneros obstáculos, sino para que, unidos, encontremos el mejor modo de sortearlos.

ALUMNOS, sin vosotros no somos nadie. Nuestra profesión existe porque estáis en las aulas. Sois nuestro centro. No dejéis de esforzaros, no dejéis de intentarlo, que no os arrastre el desánimo. Creed en vosotros mismos, apreciaros tal cual sois, sin dobleces.

DOCENTES. Intentad ver más allá de las apariencias, comprender miradas, interpretar gestos, esforzaros por CONOCER, con mayúsculas, a los niños, niñas y jóvenes que están en vuestras clases. Seguramente no os hayáis parado a "rascar." Y, lo digo por experiencia por propia con ellos, para entenderlos hay que conocerlos. Y sí, se puede. Y sí, se dejan, incluso los adolescentes. Solamente demandan atención, un poco de cariño, cero juicios...Y os sorprenderán.

De educar con cariño, es indispensable. Y no se trata de estar todo el santo día dando abrazos. Hay muchas formas de ser cariñosos. El cariño al hablar, el cariño al mirarlos, el cariño en nuestros gestos, el cariño al prestarles atención...Sin cariño, pienso que no existe educación, ni en los colegios ni en los institutos.

Y como nos cuenta Manuel Velasco en su introducción al principio de la reflexión de su mujer, "Gaëlle me enseñó que educar es sinónimo de amar y que lo más importante es siempre intentar llegar al corazón de nuestros alumnos." Ahí queda eso. Qué bonito, y a la vez, cuánta razón.

Gracias Gaëlle por tus emotivas palabras. Aunque la entrada es de mayo, la he leído ahora. Se vislumbra vocación en ella, y eso es complicado de encontrar. También a mí me gustaría pensar que si el día de mañana me encuentro con alguien que ha sido alumno mío, al menos no me va esquivar con su mirada. Y, si es posible, que me saluden y me den la opción de preguntarles qué tal les va tratando la vida. Por supuesto, como tú Gaëlle, necesito que sepan que sigo estando para ellos, y no solo para las cuestiones académicas. Simplemente eso, aquí estoy querídísimos ex-alumnos, para lo que necesitéis: hoy, mañana y SIEMPRE. El cariño no tiene fecha de caducidad.

Buen estreno de semana a todos.





No hay comentarios:

Publicar un comentario